EUROPA , ESPAÑA,
MELILLA, ÁFRICA,
Melilla cuenta con siglos de historias
que se reflejan en la riqueza cultural de este enclave milenario. Su
ubicación geográfica en el norte de África la convierte en una
puerta que se abre para mostrar otras realidades y otros países de este continente, por
lo que puede considerarse como el punto de partida de numerosas rutas y expediciones, tanto
culturales y arqueológicas como por la naturaleza del lugar. Belleza para todos los gustos.
Para quienes llegan desde la península, lo primero que les llama la
atención es la mezcla étnica de
sus habitantes,
que se muestran en sus actividades más cotidianas y de un modo muy
especial en la convivencia de sus celebraciones religiosas, como la
semana santa de los cristianos, el Ramadán de los musulmanes, el Junuká judio o el Diwali hindú.
Cada comunidad aporta así sus propios matices a la ciudad autónoma, dotándola de una magia exclusiva que atrae al viajero, quien puede observar, sin salir de
la ciudad, varias realidades sociales. En poco mas de doce kilómetros cuadrados que ocupa su superficie, la magnitud de Melilla se mide por este complejo entramado social que rezuma vitalidad, y
por su gente, pacifica y heredera de la sabiduría acumulada durante
siglos de convivencia en la diversidad. El melillense es generalmente agradable con los visitantes porque le encanta todo
lo que provenga del exterior y le gusta conocer otros usos y costumbres al mismo tiempo que no
dudará en mostrarnos, entusiasmado, los secretos de su ciudad.
Desde un tiempo hacia acá, Melilla va tomando conciencia de la
importancia de sus recursos para un buen desarrollo turístico. Gracias a la incorporación tardía
de esta ciudad al fenómeno del turismo ha permitido que el desarrollo del sector se haga
sostenible y con pautas altamente respetuosas con el medio ambiente, por lo que el visitante
encontrará en Melilla precisamente esa característica que la distingue de los núcleos turísticos que
tuvieron su despegue en la época del boom de los 60. Melilla evoluciona para ofrecer servicios de
calidad sin perder su identidad. Sin superar los limites que provocarían saturación siempre negativa.
Ademas de la enorme importancia que la convivencia de las cuatro cultura aporta al presente de Melilla, no hay que olvidar la privilegiada situación que históricamente mantuvo la ciudad y que ha sabido conservar los importantes legados que fenicios, romanos, vándalos, bizantinos y aŕabes dejaron en ella todo ello ha convertido a Melilla en un singular arquitectónico tan diverso como exótico y diferente.
Melilla la vieja o el pueblo, como cariñosamente le llaman los
melillenses, y que muchos ahora también la conocen con el nombre de la ciudadela comprende el
recinto fortificado que comenzó a construirse en el siglo XV sobre la roca que sirvió de asiento a la
antigua Rusadir de fenicios y romanos. Este conjunto monumental se comprende de cuatro recintos separados por
foso o cortadura. Los tres primeros se internan en el mar y el cuarto sobre el continente. En
este último destacan los fuertes del rosario y de las victorias,
desde donde se realizaron los disparos del cañón El Caminante, que
determinó los actuales limites de Melilla.
Frente a la plaza de las culturas, en pleno centro de la ciudad,
está situada la Melilla del siglo XIX formada por los pequeños y coquetos barrios del fuerte de San Carlo,
fuerte de San Miguel y Alcazaba y Mantelete. La ciudad moderna de Melilla tiene encanto muy especial. La hermosa plaza de España, precedida por el Palacio de La Asamblea, es de gran animación al
tratarse del centro neurálgico de la ciudad.
Melilla
modernista
Albert Einstein comento un día: la belleza no mira es mirada. Con
esa misma ingenua y modesta actitud, Melilla nos invita a descubrir una belleza inédita. La
perfección del trazado urbano melillense y la monumentalidad de su
arquitectura pueden hacer de Melilla ciudad patrimonio de la humanidad. Melilla oculta uno de esos adivinados secretos que es el
modernismo. Sobre las calles de la ciudad autónoma se levantan centenares de
edificios diseñados para cautivar la mirada del viandante. Construcciones diferentes todas
ellas que han convertido la ciudad en el principal centro modernista de África y
el segundo de España después de Barcelona.
La Melilla modernista que conocemos, consomtruida a principios del
siglo XX es el resultado de la interrelación de estilos y personajes que creyeron en la
ciudad y la dotaron de una elegancia serena y vigorosa. Esta esencia modernista llega a Melilla
de la mano del arquitecto Enrique nieto, un discípulo de Gaudí que a comienzos del
siglo pasado escapó de la sombra del genio catalán para dar rienda suelta a su
imaginación en las calles de esta ciudad norteafricana. La influencia del modernismo alcanza
incluso a las distintas religiones de la ciudad. Nacía una nueva concepción de la ciudad,
una peculiar manera de entender un urbanismo poblado de nacionalidad militar pero
influido por las corrientes modernistas llegadas desde Cataluña.
------
Se fiel a ti mismo
Desde que uno nace, piensa:
qué será aquello que me hará grande?
Quizás sean los años los éxitos, los
aplausos.
Tener un apellido u otro.
O haber nacido más al norte o más al
sur.
Pensarás que la juventud, la belleza o
el dinero
son lo que hará grande.
Que uno es tan grande como todo aquello
que posee.
Nada mas lejos de la verdad.
Porque solo hay una cosa en este mundo
que te hará grande:
molt ven exposat pero no es el dia
ResponEliminaAnònim, com que no és el dia? El tema és lliure... vas una mica despistat!!!!!!
EliminaMe has descubierto Melilla... yo, como pacifista, nunca sentí interés por esa ciudad que siempre había oido como llena de militares y me la imaginaba totalmente diferente. Ahora me han entrado ganas de ir a conocerla. Felicitaciones por tantos años de convivencia.
ResponEliminaTambién me gusto mucho lo de ser fiel a ti mismo... cuanta razón tienes y que poca gente se da cuenta de esto...
Contemplo una ciudad mágica de gran belleza ¡Espero conocerla, pronto !
ResponEliminaMelilla es una ciudad del Mediteraneo bañada por unas playas maravillosa y un clima
ResponEliminatemplado todo el año os invito a que la visitéis sobre todo en el mes de septiembre
que son las fiestas de esta ciudad